Odio la Navidad
Cada día odio más la navidad
En realidad no.
No odio la navidad.
Ni jamás la voy a odiar.
“Entonces a qué viene el asunto del correo ?”
Déjame que te explique, querido lector.
De siempre me ha encantado la navidad.
Estar con la familia.
Comer cosas ricas.
Las luces navideñas.
Los regalos.
Ver pelis de antena 3 con la mantita.
Ver harry potter.
En fin, lo digo y se me pone una gran sonrisa en el careto.
Pero hay una cosa que ya no me gusta tanto de la navidad, y son los regalos.
Osea los regalos me encantan, no me malinterpretes.
Pero a medida que voy creciendo, veo los regalos más como una forma de conocer a la otra persona que como una forma de aprovechar la navidad.
De pequeño, veía la navidad como una oportunidad fantástica para poder pedir todo aquello que yo no podía comprarme.
Que si un iPad, que si la play…
Lo que todo niño hace vaya.
Pero llevo un par de años que el día de navidad y el día de reyes ya no son lo mismo.
Quiero decir, me sigo poniendo nervioso como un hijoputa, pero no son lo mismo.
Y te voy a explicar el por qué.
¿Qué hay más bonito que ganarte lo que quieres?
¿Hay algo más bonito que trabajar por algo que quieres y comprarlo tú?
Yo creo que no.
Ahora podrás estar pensando:
“Este tío es tonto, me está diciendo que si te regalo un móvil no lo aceptas ?”
Para nada.
A lo que me refiero es que a cuando yo quiero algo:
Me lo compro
Trabajo duro para poder generar el patrimonio para comprármelo.
De hecho me suelen decir que es difícil regalarme cosas porque cuando quiero algo me lo compro.
Y es justo ahí cuando entra la magia de los regalos, y lo que cada vez más aprecio de la navidad.
El hecho de conocer a la otra persona.
Que te hagan un regalo que te encante aunque valga una puta mierda.
Por eso aunque te haya dicho al principio del correo que cada vez odio más la navidad.
Te he mentido.
Porque cada vez me gusta más trabajar por aquello que yo quiero.
Y porque cuando me regalan algo que me gusta por navidad, esa persona te está demostrando que te conoce y que te quiere mucho.
Como yo a ti.
Y como te quiero tanto.